Es una sal de mina, procede de las montañas de Entre Ríos – Tarija, formada hace millones de años por la concentración de depósitos salinos de origen evaporítico, con bastante contenido de hierro, responsable de otorgar a la sal su característico color rosa. Se extrae de las profundidades de la tierra, es permanente durante todo el año.
La sal rosada es una sal natural, frágil, delicada y única por su sabor armonioso y su alto contenido en minerales esenciales como calcio, cobre, fósforo, hierro, magnesio, manganeso, nitrógeno, potasio, zinc y yodo. Contiene mucho menos sodio que otras sales. Proporciona una experiencia en sal verdaderamente exótica y única. Con poca sal obtienes una sazón suave, su textura permite una mejor adherencia con alimentos. Esto nos ayuda a tener un consumo de sodio controlado de forma natural.
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